martes, 30 de agosto de 2011

Día 21

Pedro

Tu estabas presente cuando papá pesó la maleta en el aeropuerto, resultado sobrepeso acompañado de una discusión familiar sobre que cosas debería sacar y que no en medio del aeropuerto. Finalmente se quedaron en Galicia mi crema corporal y el libro de inglés. ¿Por qué a nadie se le ocurriría quitar el champú y el acondicionador?.Y es que sí Pedro, después de años fiel a Pantene me veo obligada a pasarme a la competencia. Razón, la misma por la cual me lavo los dientes con agua mineral. Pero que se le va a hacer, las cosas cambian, sobretodo cuando te encuentras a 6000 kilómetros de casa.

Por suerte el cambio de champú funcionó y mi pelo volvió a estar igual que siempre, lo cual no es ninguna maravilla, a tiempo para empezar el high school. Así que allí estaba yo, sentada en el autobús amarillo, vaqueros, blusa, sandalias y pelo aceptable, preparada para morir. Aunque claro estaba que si los entrenamientos de cross country no habían conseguido acabar conmigo, no lo iba a hacer el primer día de clase.



Las cosas van bien, no soy miss popularidad, nunca busqué serlo. Pero poco a poco me voy abriendo un hueco.


viernes, 19 de agosto de 2011

Día 10

Sheila,

Llevo días intentando escribirte, pero no me salían las palabras, no sabía que contarte, y no es precisamente porque hayan pasado pocas cosas en estos días, más bien todo lo contrario. Todo es nuevo Sheila, voy por la calle y no se a donde mirar, no se a que sacarle fotos y a que no, igual que no sabía que contarte y que no, que te podría interesar y que te daría igual. Hasta que hoy mientras me estaba lavando los dientes con agua mineral; si mineral, de botella,es una larga historia; me di cuenta de que era precisamente eso lo que deberías saber. Decirte que todo parece sacado de una película americana, si una de esas, bueno para que mentir más bien maliñas e insulsas que no cuentan nada porque realmente no buscan contar nada , pero que al fin y al cabo te entretienen como mínimo una hora.

Las cosas son diferentes aquí, y eso choca, sobre todo al principio, pero poco a poco te vas a costumbrando, o buscas la forma de hacerlas más parecidas a las que son normales para ti.

jueves, 11 de agosto de 2011

Día 2

Sabela:

Te dije que tenia la sensación de que se me quedaban cosas atrás pero no sabía lo que. Pues ya lo se, te dejo a ti, dejo a mis padres, dejo a tanta gente y al mismo tiempo vosotros dejáis un vacío que no se va a llenar fácilmente. Sé que conoceré a gente maravillosa, pero también sé que nada sera igual por la simple razón de que no hay dos personas iguales, no va a ser mejor o peor simplemente será distinto, y eso no es malo pero duele.

Duele ver a tu familia llorar por ti, duele despedirte de la gente, duele meter tus cosas en una maleta y dejar tu habitación vacía, como si ya nadie fuera a vivir allí, y es que va a ser así, nadie va a vivir allí. Los libros cogerán polvo, el colchón se pondrá duro y la ropa comenzara a oler a cerrado.

A veces me pregunto que haré yo sin ti, que haré en un lugar donde nadie entiende el significado de la palabra choni, donde la gente con estilo es rara y hace demasiado frío como para llevar manga corta todo el año. Y es que si no fuera por ti, probablemente ahora no estaría donde estoy me distes fuerzas, te hiciste la fuerte por mi sin que yo te lo pidiera, las cosas ahora serían muy diferentes si no te hubieras comportado como lo hiciste, aunque admito que en momentos llegue a pensar que te daba igual que me fuera, que te traía sin cuidado. Ahora comprendo que hiciste mucho más de lo que hicieron otros, una fiesta sorpresa con regalos emotivos me habría encantado pero también me habría hecho la despedida más difícil de lo que ya fue, sin embargo, tu conseguiste que todo fuera tan sencillo como respirar.

Tan solo te pido que me recuerdes tal y como soy, con el tiempo los recuerdos varían, lo malo pasa a ser horrible y lo bueno maravilloso, por eso dicen que siempre recordamos aquello que nunca sucedió, los recuerdos se distorsionan de tal modo que al final ya no sabes ni que era lo que realmente querías recordar. No quiero que eso te suceda ti, sabes perfectamente como soy, no me conviertas en una idealización porque no quiero decepcionarte al volver.



P.D.: Feliz cumpleaños

jueves, 4 de agosto de 2011

Día -4

Ya no importaba que me fuera, dejé de pensar en la maleta, paré de contar los días y me sentí libre, totalmente libre.

Me dejé llevar por la emoción, canté sin que me preocupara desafinar, aplaudí hasta destrozarme las manos. Me sentía como una grupi loca, una grupi loca que se lo estaba pasando de miedo. Y, es que, he de admitir que disfruté, disfruté como hacia tiempo que no disfrutaba de nada.


No sé exactamente cuando cambiaron las cosas, pero ya no siento que los días se me escapan de las manos. Esta última semana es como una carrera, una carrera que quiero completar en el mínimo tiempo posible.